El cierzo soplaba fuerte en Zaragoza y no apetecía salir. Me llegó un correo con una promo y decidí usarla. Estaba harto de perder combinadas por un solo gol, pero esta vez en
rolldorado acerté todo el boleto. Aposté a unos resultados difíciles y sonó la flauta. Recuperé con creces lo invertido en semanas anteriores y me di un capricho comprando algo online. Da gusto cuando la intuición por fin funciona bien y aciertas.